El imperialismo ruso, va en
la guerra y agente del fascismo en Francia
El fascismo no es una
"respuesta" al riesgo de revolución, sino un producto inevitable del
capitalismo en crisis en búsqueda de una solución por cualquier medio. Esto
es el principio de la tendencia a la guerra imperialista.
Por esta razón, el antifascismo no es un
llamado a la "revolución", sino a la lucha por la democracia. Este
es un frente más amplio que está en contra de las medidas cada vez más
militarizadas y corporativas impuestas por los monopolios, contra las iniciativas
a lo largo de las líneas de la competencia internacional, a la guerra.
En este sentido, el imperialismo ruso
debe ser expuesto de la manera más formal para sus frenéticas contribuciones al
campo fascista en nuestro país.
El régimen de la oligarquía rusa se
mantiene vigente con su ultranacionalismo acompañada por la represión política
y social, las materias primas (petróleo y gas) y su ámbito militar altamente
desarrollado en brazo de la economía cuyo PIB es relativamente equivalente a la
de México.
Es una caricatura del
socialimperialismo soviético de Leonid Brejnev a finales de 1970 y, al igual
que él, empuja al conflicto. La anexión de Crimea y los intentos de formar
una "nueva Rusia" al este de Ucrania dan testimonio de su agresión, y
a su intervención militar masivo en apoyo del régimen sirio, su apoyo a fracciones
talibanes en Afganistán.
A esto hay que añadir el intento de un
frente ideológico en Europa. Haciéndose eco de los conceptos nacional-bolcheviques
desarrollados por Alexandre Duguin, Rusia se erige como la punta de lanza del
tradicionalismo contra la decadencia de la "sociedad abierta", es
decir, de la sociedad occidental, donde se desvanece la enseñanza moral, de
hecho, ante el rodillo compresor ultraliberal.
Esta ideología ultraconservadora es
precisamente el de la derecha europea extrema, incluyendo Marion Maréchal-Le
Pen en Francia, pero también muy importantes figuras políticas en sus países,
como Viktor Orbán en Hungría y Heinz-Christian Strache en Austria. La
ideología de Donald Trump no es también diferente.
(El) imperialismo ruso también ha
organizado los medios de comunicación que actúan en todo el mundo para
contribuir a esta visión del mundo que puede denominarse altermundialismo de
derecha, es decir fascista. El canal de televisión en línea RT y
la agencia de noticias Sputnik son vectores de comunicación
muy activos, especialmente en nuestro país. Esto viene en el marco de un
plan de medias organizada en 2013 por el propio Vladimir Putin, como el Rossia
Segodnya (Russia Today).
Esto está guardando en mente todo el
dispositivo ideológico y medios de comunicación, así como la agresividad de
Rusia, tenemos que comprender la importancia de la visita de Marine Le Pen en
Rusia, que acaba de tener lugar.
Fue invitada oficialmente por el
Parlamento ruso, la Duma; a continuación, fue recibida, por
primera vez en público, por Vladimir Putin en persona en el Kremlin. La
visita recibió una intensa cobertura mediática en Rusia. Vladimir Putin
durante su reunión, expresó su apoyo prácticamente abierto por lo que
representa:
"Es interesante compartir con
ustedes sobre cómo desarrollar las relaciones bilaterales y la situación en
Europa. Sé que representan un espectro político europeo que crece lo
suficientemente rápido. "
Ella misma ha reafirmado su propuesta
de alianza estratégica:
"Como saben, siempre he sido
partidaria de Rusia y enlaces de apoyo al más alto nivel... espero que en dos
meses, si alguien me ofrece la oportunidad, me quedo tan fiel a esta posición. "
Sergueï Lavrov, ministro ruso de
Asuntos Exteriores de Rusia, también dio la bienvenida a Marine Le Pen:
"Yo no diría que Donald Trump o
Marine Le Pen son marginales. Por el contrario, para mí, son plenamente
compatibles con los principios fundamentales que rigen las compañías americanas
y francesas. "
Esto es claramente una interferencia
del imperialismo ruso en las elecciones presidenciales, Marine Le Pen
representa la parte más agresiva de la burguesía francesa, que quiere que
Francia haga "solo" y viendo en Rusia una oportunidad para esto.
(El) imperialismo ruso también es
compatible con otros candidatos presidenciales que se mantengan François Fillon
está cerca de Vladimir Putin y es compatible con una línea pro-ruso, como el
soberanista François Asselineau.
Pero en esta lista hay que añadir Jean-Luc
Mélenchon, que no dudó durante el debate televisado de guardia TF1 para
reconocer la anexión de Crimea por Rusia. ¡Se reconoce el principio de la
conquista militar imperialista!
(El) imperialismo ruso es va en la guerra
y el fascismo agente en Francia, ya que, para servir a sus intereses, es
compatible con las fuerzas más agresivos, los más reaccionarios.
(El) imperialismo ruso no es la causa del
fascismo en Francia: las contradicciones siguen siendo interno y el fascismo en
Francia responde a las necesidades específicas, los del imperialismo francés
que necesita para militarizar, para "mantener su rango ".
Todos los progresistas, todas las
personas han de entender el significado de la democracia, sabe que el mundo está
experimentando una serie de trastornos, ataques militaristas, que expresa una
tendencia cada vez mayor de la guerra.
El capitalismo conduce inevitablemente
a la guerra.
Ni Benedict ni Hamon Emmanuel Macron no puden oponerse a ella porque consideran que el capitalismo puede ser pacífico, o ncluso representa la paz, por el "progreso" que cnsite consiste el ultraindividualismo.
N
Por tanto, lo que necesitamos es un
frente amplio, el contenido no puede no ser que la batalla por la
democracia : contra la guerra, contra el nacionalismo, para el
patrimonio nacional y democrático, por el reconocimiento ecologista (de la) Biosfera!
Partido Comunista de Francia
(Marxista-Leninista-Maoísta)
25 de marzo de 2017
25 de marzo de 2017
Publicado por Les materialistes
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